
El CEO de Activision, Bobby Kotick, podría ser la razón por la cual las dos partes se han callado sobre esta extensión.
Microsoft ahora ha pedido una extensión de su contrato con Activision.

Como reportado por Reuters, la compañía y Activision están actualmente en negociaciones para extender su fecha límite para cerrar el trato más allá de hoy, 18 de julio de 2023.
Si bien Microsoft obtuvo una victoria rotunda cuando ganó la demanda de la FTC en busca de una orden judicial para bloquear el acuerdo, el acuerdo aún no se ha completado, y esto puede ser un punto de discordia entre las dos compañías.
Si Microsoft no consigue ampliar el plazo, no es necesariamente el final del trato. Sin embargo, abriría las posibilidades de que Microsoft o Activision se retiren del acuerdo.
Es posible que ese no sea el resultado que desean los líderes de Microsoft o Activision. Sin embargo, incluso esos jefes son responsables ante la junta directiva de ambas empresas y también ante sus accionistas, en diversos grados.
Microsoft y Activision tienen todas las razones para cerrar el trato. Ambas compañías tienen grandes planes en juego con este acuerdo. Si bien Microsoft ha hecho pública su intención de usar los juegos de Activision para obtener una ventaja en los juegos móviles, Activision contará con el respaldo sólido de una de las compañías tecnológicas más grandes del mundo para financiar y respaldar sus juegos.
Puede que no sea fácil para los jugadores entender cómo esto marca la diferencia para Activision. Después de todo, ellos mismos ya son uno de los gigantes en el negocio de los juegos, como un conglomerado de Activision, Blizzard y King.
No es tanto que Activision necesitara más dinero para hacer juegos, sino que ahora tienen la oportunidad de correr más riesgos. Como empresa independiente, tenían que justificar cada proyecto ante los accionistas, demostrando planes elaborados para ganar cantidades astronómicas de dinero. Al menos, así fue como Bobby Kotick, el director general de Activision durante mucho tiempo, ha dirigido su empresa durante décadas.
Bajo Microsoft, las reglas pueden y probablemente cambiarán. Bobby ha accedido a irse si el acuerdo se lleva a cabo, y los muchos estudios que anteriormente estaban bajo su mando pueden seguir haciendo juegos como lo hacían antes, o pueden probar cosas nuevas. Como sabemos ahora, Microsoft permite que sus estudios adquiridos tengan carta blanca, incluso hasta el punto de fallar.
Pero entonces, el propio Bobby podría ser la razón por la que esta extensión se ha vuelto tan repentinamente silenciosa. Ni Microsoft ni Activision se han pronunciado públicamente sobre su negociación para esta extensión. Ciertamente parece que Activision podría estar buscando algo extra de Microsoft para convencerlos de que firmen.
Cualquiera que sea la situación, podemos averiguarlo en cuestión de horas.